Estaban previstos una serie de actos a lo largo de este año, destacando entre ellos el culto extraordinario en la Iglesia parroquial de San Juan Bautista, a celebrar el 20 de febrero, haciéndolo coincidir en lugar y fecha en que fue bendecida, María Santísima de la Paloma, hace 50 años.
"Desafortunadamente, en estos momentos en los que nos enfrentamos a la peor situación de expansión de esta pandemia, que nos asola desde hace casi un año, hemos de hacer un ejercicio de responsabilidad, anteponiendo los intereses generales a los particulares, sabiendo y reconociendo que el amor a la Santísima Virgen no puede lastimar ni empañar nuestra concienciación hacia la sociedad y hacia nosotros mismos.
Por ello, pendientes de la ratificación de la Junta de Gobierno, hemos planteado un nuevo calendario para celebrar este 50º aniversario de la Bendición de María Santísima de la Paloma, que comenzará el próximo día 20 de febrero, con una solemne Misa de conmemoración, y que será el culto inaugural de esta efeméride. Tras éste se presentará el Logotipo conmemorativo y se dará a conocer el programa de actos previstos, dando oficialmente por iniciado el periodo de celebraciones, adaptado a las medidas sanitarias que en ese momento rijan y que nos permita la celebración de dicho culto inicial.
Partiendo de la intención que los actos conmemorativos se celebren cuando el horizonte sanitario mejore y conociendo las previsiones existentes, hemos consensuado que, una vez hecho el culto inaugural, se retomarán los actos del 50º aniversario, una vez pasada la Semana Santa, concretamente a partir de mayo, mes mariano por excelencia, y en adelante continuaremos con el nuevo calendario previsto que se prolongaría hasta el mes de octubre de 2021, en la confianza de que durante dicho periodo la crisis sanitaria actual haya mejorado".
La Junta de Gobierno, sigue manteniendo su firme voluntad de celebrar unos cultos solemnes en la antigua sede, la Iglesia parroquial de San Juan Bautista, por la enorme carga histórica, emocional y de simbolismo que concurre en el hecho de revivir la estancia de María Santísima de la Paloma en dicho templo, donde fue bendecida y donde se le rindió culto durante décadas.
Fuente y foto: La Puente y la Paloma