La hermana de Pablo Ráez presenta un libro en su homenaje: "Su legado sigue. Pablo sigue muy vivo"
Hace siete años desde que Málaga y parte de España se despidió de Pablo Ráez, aquel chico de Marbella que, desde la cama de un hospital, convirtió el "Siempre fuertes" en un grito colectivo y disparó las donaciones de médula ósea en todo el país.

